Lo que soy, lo que quiero ser, lo que soy, lo quiero ser...
¿ Cuántas veces, cuando conocemos a alguien (sin mala intención) exponemos mas lo que buscamos ser, que quien realmente somos? No a traves de una descripcion verbal, pero si con una determinada forma de ser...
La gran mentira, que expone lo que creemos ser, es nuestra verdadera personalidad, cuando no es mas que un atisbo de euforia... un intento suicida de coincidir con esa otra persona, sea quien sea, alguien quien nos interesa, nuestro futuro jefe, un profesor, una amiga nueva, una audiencia, un grupo determinado, quien sea... es algo totalmente inconsciente cuando de personas buenas se trata (para que perder el tiempo con las otras), pero no deja de ser la mas crueles de las mentiras, puesto que a la otra persona, la hemos engañado, pero sin darnos cuenta hemos despertado en nosotros una ilusion respecto a nuestra personalidad, que cuando no se torne en realidad no hará mas que herirnos a niveles que afectan nuestro autoestima... y esto es cuando conocemos a alguien...
¿Que sucede cuando pensamos respecto de nosotros mismos? ¿Que pasa cuando planeamos? ¿Utilizamos los recursos que de verdad tenemos, o los que aspiramos a tener? Continúa este engaño... hoy actuo mañana pago, pero el precio a pagar es inestimable, puesto que no es algo pecuniario, será algo superior, seremos nostros....
Nos vemos con los ojos que aspiramos que nos vean, y esta cruda combinación de sueño y realidad, que no se transforma en lo que aspiramos, es decir, algo existencial y palpable, nos convierte en la mas grande de las mentiras... ¿ Cuántos quedan por ahí, que utilizan su verdadera personalidad para generar un impacto donde sea que quieran generarlo?
La gente auténtica día a día desaparece al igual que toda idea verdadera, es como si el comercio ha logrado comprar todas las personalidades, y ya tenemos puestos de venta de personalidades, ¿ Dónde esta? Lo mas triste... ¿En nuestra cabeza? NO, esta en el decir de los demás, queda allá entre sociedad y critica, bajas tres cuadras de hipocresía, y encuentras esta tienda de mentiras, donde tienen una caja llena de autenticidad, por el canje que decides hacer: tu personalidad, tus verdaderos gustos, quien en realidad eres, por un traje falso que supuesta-mente agradará a todos, y aún si funciona, ¿ Cuánto durara? O mas importante... si mucho mas importante... ¿Eres feliz?
" El hombre emplea la hipocresía para engañarse a sí mismo, acaso más que para engañar a los otros "
Jaime Balmes
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